martes, 25 de mayo de 2010

VATICANO - BENEDICTO XVI


VATICANO - Benedicto XVI invita a rezar “por todos los ministros del Evangelio, para que el mensaje de la salvación sea anunciado a todas las gentes” y recuerda la Jornada de oración por la Iglesia en China
Ciudad del Vaticano (Agencia Fides) – “Cincuenta días después de la Pascua, celebramos la solemnidad de Pentecostés, en la que recordamos la manifestación de la fuerza del Espíritu Santo, el que – como viento y como fuego – bajó sobre los Apóstoles reunidos en el Cenáculo y los hizo capaces de predicar con valentía el Evangelio a todas las gentes (cfr At 2,1-13)”: antes de rezar la oración mariana del Regina Caeli con los fieles y los peregrinos reunidos en Plaza San Pedro el Domingo de Pentecostés, el 23 de mayo, el Papa recordó lo que narran los Hechos de los Apóstoles, y puso en relieve como “la Iglesia vive constantemente de la efusión del Espíritu Santo, sin el cual agotaría sus fuerzas, como una barca a vela a la que le faltase el viento”. Pentecostés se renueva en algunos momentos fuertes, en pequeñas asambleas y en grandes reuniones, como en las Liturgias vividas en momentos especiales para la vida de la comunidad, “en las que la fuerza de Dios se ha percibido en modo evidente, infundiendo en los ánimos alegría y entusiasmo”.
Acerca de la relación entre Pentecostés y la Virgen María, el Papa prosiguió: “No hay Iglesia sin Pentecostés. Y añadiría: no hay Pentecostés sin la Virgen María. Así fue al inicio, en el Cenáculo... y así es siempre, en todo lugar y en todo tiempo”. Benedicto XVI, haciendo memoria de su reciente visita a Fátima, añadió que “en cualquier lugar en el que los cristianos se reunen en oración con María, el Señor dona su Espíritu”. Finalmente invocó “una renovada efusión del divino Paráclito” para toda la Iglesia, “en particular, en este Año Sacerdotal, para todos los ministros del Evangelio, para que el mensaje de la salvación sea anunciado a todas las gentes”.
Después de la oración mariana el Santo Padre recordó la Jornada de oración por la Iglesia en China con estas palabras: “La memoria litúrgica de la Bienaventurada Virgen María, Auxilio de los Cristianos, nos ofrece – mañana 24 de mayo – la posibilidad d celebrar la Jornada de oración por la Iglesia en China. Mientras los fieles que están en China rezan para que la unidad entre ellos y con la Iglesia universal sea cada vez más profunda, los católicos en el mundo entero – especialmente los que son de origen china – se unen a ellos en la oración y en la caridad, que el Espíritu Santo infunde en nuestros corazones particularmente en la solemnidad de hoy” (SL) (Agencia Fides 24/05/2010; líneas 25 palabras 408)

EUROPA/ESPAÑA - Se celebró en el Santuario de Torreciudad la Jornada de Oración por la Iglesia en China

Torreciudad (Agencia Fides) – Las familias chinas que viven en Zaragoza, Bilbao, Madrid y Barcelona participaron ayer, domingo 23 de mayo, en la tercera Jornada Mundial de Oración por la Iglesia en China, que tuvo lugar en el Santuario de Torreciudad. Según las informaciones llegadas a Agencia Fides, dos sacerdotes chinos, que prestan su servicio pastoral en la comunidad católica que vive en España, acompañaron a casi cien peregrinos, entre ellos muchos adultos que recibieron el Bautismo, la Confirmación y la Eucaristía en la celebración de la última Pascua. En la mañana los peregrinos dieron vida a una procesión en la plaza del Santuario llevando la imagen de Nuestra Señora de China. Seguidamente tuvo lugar la celebración de la Eucaristía en mandarín. Por la tarde los participantes recitaron el Santo Rosario en sintonía vía teléfono con una parroquia de Taiwán y otra de China continental. (CE) (Agencia Fides 24/05/2010; líneas 12, palabras 161)

miércoles, 19 de mayo de 2010

"URGEN SACERDOTES Y MISIONEROS EN 3 D"


VATICANO - Llamamiento del cardenal Ivan Dias: “Urgen sacerdotes y misioneros en 3D”

Roma (Agencia Fides) – “El mundo necesita sacerdotes y misioneros en 3D, que velen por la Doctrina, la Disciplina, la Devoción” es el llamamiento lanzado por S. Em. El Card. Ivan Dias, Prefecto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos a todos los sacerdotes y misioneros en el mundo, en vista e la conclusión del Año Sacerdotal, proclamado por Benedicto XVI.
El Cardenal Dias habló ayer por la tarde en la Asamblea general de las Obras Misionales Pontificias que se está celebrando en Roma (ver Fides 17/05/2010), y se detuvo en la identidad y en la calidad que cada sacerdote y misionero ha de cultivar en su vida y en su ministerio, diciendo: “Todo sacerdote, en su proceso de crecimiento y en su ministerio, debe cuidar tres dimensiones: Doctrina, Disciplina, Devoción. Cuidar la Doctrina significa ser fiel a la Palabra de Dios, al Magisterio de la Iglesia, observando las palabras del Santo Padre. La segunda, la Disciplina es muy importante hoy en día, y se debe profundizar más en ella. Es la disciplina de la mente y del cuerpo, signo y fruto de una madurez humana y espiritual. Esto incluye la formación a la castidad y a las relaciones correctas con el sexo opuesto; la gestión de las discordias y de los conflictos en las relaciones y en la comunidad; la gestión del tiempo libre y del uso de las nuevas tecnologías. Por la Devoción, me gustaría destacar que el sacerdote, en cada pequeña acción cotidiana, debe tener bien presente que es un hombre de Dios, debe dar prioridad al espíritu, recordando que está en el mundo, pero no es del mundo”.
“En general – ha dicho el Cardenal, dirigiéndose a todos los sacerdotes y misioneros presentes – sed personas que ‘transpiren lo sagrado’, especialmente en la celebración de la santa Misa y en el administrar los sacramentos, ayudando al prójimo a encontrar la persona viviente y operante de Jesucristo”.
El Cardenal Dias ha recordado también que todo sacerdote, como todo cristiano, “tiene en su ADN el espíritu de la misión”, de lo contrario “es un cristiano mal formado o todavía no bien formado”
Como modelo de persona y de sacerdote que ha vivido plenamente estas tres dimensiones, así como el espíritu misionero, el prefecto de “Propaganda Fide”, ha señalado a todos el Cardenal John Henry Newman, que será beatificado el 19 de septiembre por el Papa Benedicto XVI en su próximo viaje a Inglaterra. (PA) (Agencia Fides 18/05/2010)

jueves, 13 de mayo de 2010

Viaje Apostólico de Su Santidad El Papa Benedicto XVI a Fátima.




Benedicto XVI: “Mi visita, bajo el signo de la esperanza” Discurso del Papa al llegar al aeropuerto de Portela LISBOA, martes 11 de mayo de 2010 (ZENIT.org).- Ofrecemos a continuación el discurso que el Papa Benedicto XVI pronunció hoy, a su llegada al aeropuerto internacional de Portela (Lisboa) desde Roma, en presencia del Presidente de la República de Portugal, Aníbal Cavaco Silva, del Patriarca de Lisboa, el cardenal José da Cruz Policarpo, y otras autoridades civiles y eclesiales. * * * * * Señor Presidente de la República, Ilustres Autoridades de la Nación, Venerables Hermanos en el Episcopado señoras y señores. Sólo ahora me ha sido posible acoger las amables invitaciones del Señor Presidente y de mis Hermanos Obispos para visitar esta amada y antigua Nación, que en este año celebra un siglo de la proclamación de la República. Al tocar su suelo por primera vez desde que la Divina Providencia me llamó a la Sede de Pedro, siento gran honor y gratitud por la presencia deferente y hospitalaria de todos vosotros. Le doy las gracias, Señor Presidente, por sus cordiales expresiones de bienvenida, interpretando los sentimientos y las esperanzas del buen pueblo portugués. A todos, independientemente de su fe y religión, va mi saludo amistoso, en particular a cuantos no han podido venir a mi encuentro. Vengo como peregrino de la Virgen de Fátima, investido de lo Alto en la misión de confirmar a mis hermanos que avanzan en su peregrinación hacia el Cielo. Desde los albores de su propia nacionalidad, el pueblo portugués se ha dirigido al Sucesor de Pedro para ver reconocida su propia existencia como Nación; posteriormente, un Predecesor mío honraría a Portugal, en la persona de su Rey, con el título de “fidelísimo” (cfr Pío II, Bula Dum tuam, 25 de enero de 1460), por los altos y prolongados servicios prestados a la causa del Evangelio. Respecto al acontecimiento sucedido ya hace 93 años, es decir, que el Cielo se abriese precisamente sobre Portugal – como una ventana de esperanza que Dios abre cuando el hombre Le cierra la puerta – para recomponer, en el seno de la familia humana, los vínculos de la solidaridad fraterna que se apoyan sobre el reconocimiento recíproco del mismo y único Padre, se trata de un designio amoroso de Dios; no depende del Papa, ni de cualquier otra autoridad ecclesial: "No fue la Iglesia quien impuso Fátima – diría el cardenal Manuel Cerejeira, de venerada memoria –, sino que fue Fátima la que se impuso a la Iglesia". La Virgen María vino del Cielo para recordarnos verdades del Evangelio que constituyen para la humanidad, fría de amor y sin esperanza en la salvación, fuente de esperanza. Ciertamente, esta esperanza tiene como primera y radical dimensión no la relación horizontal, sino la vertical y trascendente. La relación con Dios es constitutiva del ser humano: éste ha sido creado y ordenado hacia Dios, busca la verdad en su propia estructura cognoscitiva, tiende hacia el bien en su esfera volitiva, y es atraído por la belleza en la dimensión estética. La conciencia es cristiana en la medida en que se abre a la plenitud de la vida y de la sabiduría, que tenemos en Jesucristo. La visita, que ahora comienzo bajo el signo de la esperanza, quiere ser una propuesta de sabiduría y de misión. De una visión sabia sobre la vida y sobre el mundo deriva el justo ordenamiento de la sociedad. Puesta en la historia, la Iglesia está abierta a colaborar con quien no margina ni reduce al ámbito privado la consideración esencial del sentido humano de la vida. No se trata de un enfrentamiento ético entre un sistema laico y un sistema religioso, sino más bien de una cuestión de sentido a la que se confía la propia libertad. Lo que distingue es el valor atribuido a la problemática del sentido y a su implicación en la vida pública. El giro republicano, que se produjo hace cien años en Portugal, abrió, en la distinción entre Iglesia y Estado, un nuevo espacio de libertad para la Iglesia, al que los dos concordatos de 1940 y de 2004 habrían dado forma, en ámbitos culturales y perspectivas eclesiales demasiado marcadas por rápidos cambios. Los sufrimientos causados por las transformaciones han sido en general afrontados con coraje. Vivir en la pluralidad de sistemas de valores y de cuadros éticos requiere un viaje al centro del propio yo y al núcleo del cristianismo para reforzar la calidad del testimonio hasta la santidad, encontrar caminos de misión hasta la radicalidad del martirio. Queridísimos hermanos y amigos portugueses, os doy una vez más las gracias por la cordial bienvenida. Que Dios bendiga a quienes se encuentran aquí y a todos los habitantes de esta noble y querida Nación, que confío a la Virgen de Fátima, imagen sublime del amor de Dios que abraza a todos como hijos. [Traducción del original portugués por Inma Álvarez ©Libreria Editrice Vaticana]

sábado, 8 de mayo de 2010

"MEDICINA Y FE"


EUROPA/FRANCIA - “Los médicos católicos son aquellos que pueden representar el verdadero rostro de la cura y de la esperanza”: XXIII Congreso mundial de la Federación Internacional de las Asociaciones Italianas de Médicos Católicos
Lourdes (Agencia Fides) – Se está realizando en Lourdes el XXIII Congreso Mundial y la Asamblea General de la Federación Internacional de las Asociaciones Italianas de Médicos Católicos (FIAMC) sobre el tema “Medicina y Fe”. Con el patrocinio del Pontificio Consejo para la Pastoral de la Salud, el Congreso-peregrinación reflexiona sobre el tema “Nuestra fe de médicos”. Por primera vez están reunidos en Lourdes miles de médicos católicos provenientes de todo el mundo. En la intervención de apertura, el Arzobispo Zygmunt Zimowski, Presidente del Pontificio Consejo para los Agentes Sanitarios, recordó lo que se dice en la Carta de los Operadores Sanitarios, en la que se lee que “el cuidado pastoral de los enfermos consiste en la asistencia espiritual y religiosa y ella es un derecho fundamental del enfermo y un deber de la Iglesia”. Citando siempre la Carta, publicada en 1995 por el mismo Dicasterio, Mons. Zimowski destacó como para “la necesaria interacción entre dimensión física, psíquica y espiritual de la persona y por deber del testimonio de la propia fe, cada agente de salud está obligado a crear las condiciones para que, a quien lo pide, expresa o implícitamente, se le asegure la asistencia religiosa”. El Presidente citó asimismo las figuras y el pensamiento de algunos doctores que, comprometiéndose por la salvaguardia de la vida y rechazando comportamientos especulativos y/o superficiales, han sabido recorrer el camino de la santidad o del testimonio de qué cosa es ser ‘verdaderos’ médicos católicos. Entre estos: San Giuseppe Moscati y San Riccardo Pampuri, O.H, Santa Gianna Beretta Molla y el Prof. Jèrôme Lejeune. Porque “los médicos católicos – concluyó el Arzobispo – son aquellos que pueden representar el verdadero rostro de la cura y de la esperanza”.
La misión de la FIAMC es la salvaguardia, defensa y promoción de la vida humana en todas las diversas culturas. En este contexto, la acción individual no es suficiente. La Federación está constituida por unas 60 asociaciones nacionales de médicos católicos provenientes de todo el mundo, y está subdividida en 6 regiones: África, Asia (AFCMA), Australia y Nueva Zelanda, Europa (FEAMC), América del Norte, América Latina (FAMCLAM). (AP) (7/5/2010 Agencia Fides; líneas 24 palabras 350)

jueves, 6 de mayo de 2010

TAMBIÉN SAN FRANCISCO JAVIER ENTRE LOS PATRONES DE LA JORNADA MUNDIAL DE LA JUVENTUD DE MADRID


EUROPA/ESPAÑA -
Madrid – También San Francisco Javier, Patrón de las Misiones, está entre los Santos Patrones de la de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) que se realizará en Madrid en agosto del 2011. Según lo reportado en la página web oficial de la JMJ, la Santa Sede ha aprobado el elenco de los Santos Patrones elegidos para la próxima edición de la JMJ, todos de origen español: San Isidro Labrador, Santa María de la Cabeza, San Juan de la Cruz, San Juan de Ávila, Santa Teresa de Ávila, Santa Rosa de Lima, San Ignacio de Loyola, San Rafael Arnaiz y, precisamente, San Francisco Javier. El elenco de los patrones pretende recorrer la historia de la Iglesia en España –según explica la nota–, partiendo de los primeros santos madrileños (San Isidro y Santa María), pasando por los Fundadores de los Carmelitas Descalzos y de la Compañía de Jesús (Santa Teresa y San Ignacio), el gran misionero del Oriente (San Francisco Javier), el eminente representante de la literatura mística (San Juan de la Cruz), el propulsor de la espiritualidad sacerdotal diocesana (San Juan de Ávila), la primera santa de la América Hispánica (Santa Rosa) y un joven de nuestro tiempo canonizado recientemente (San Rafael Arnaiz).
Francisco Javier nació el 7 de abril de 1506 en Javier, Navarra, de una noble Familia. Cumplió sus estudios en Paris, donde se encontró con San Ignacio de Loyola, y en 1537 fue ordenado sacerdote. Formó parte del pequeño grupo que en 1539 fue protagonista de la fundación de la Compañía de Jesús. Nombrado Nuncio Apostólico para las Indias, en 1542 llega a Goa y luego se dirige a Tuticorin para afrontar una misión concreta: la evangelización de los pescadores de perlas, convertidos desde hacía poco y carentes de atención pastoral. También en Japón, adonde llega en 1549, trabaja tenazmente en la evangelización. En 1552 intenta entrar en China, pero al pasar por la isla de Sanchinan una aguda fiebre lo ataca y lo lleva a la muerte el 3 de diciembre de 1552. Beatificado en 1619 y canonizado en 1622, San Francisco Javier es Patrón del Oriente desde 1748, de la Obra de la Propagación de la Fe desde 1904 y de todas las misiones junto con Santa Teresa del Niño Jesús desde 1927. (SL) (Agencia Fides 5/5/2010; líneas 26, palabras 398)